RADIAFICION PASION Y COMPROMISO

Radioafición, pasión y compromiso en el aire
Ser radioaficionado conlleva en sí el deseo innato de dialogar con el otro. La experiencia sigue sumando adeptos. En Misiones hay 330 radioaficionados con licencia habilitante, de los cuales un número importante está en Posadas donde, a su vez, está la sede del Radioclub Misiones, cuya señal distintiva es LU1IG.
Sociedad
15 de abril
Posadas (La Capital del Nordeste). Las comunicaciones electrónicas revolucionaron al mundo a fines del siglo IXX. Entre las primerísimas experiencias radiales sin duda alguna están las de los radioaficinados. El primero de ellos, a quien muchos llaman el padre de la radioafición, fue Guillermo Marconi, quien el 12 de diciembre de 1901, logró la primera comunicación intercontinental en el mundo.
La radio como instrumento de comunicación se mantiene en el tiempo sin que ninguna de las tecnologías que la sucedieron hayan podido desplazarla. Ejemplo cabal de ello lo dan los radioaficionados, cuya actividad, la radioafición, se definió como un "servicio de radiocomunicación que tiene por objeto la instrucción individual, la intercomunicación y los estudios técnicos, efectuados por aficionados, esto es, por personas debidamente autorizadas que se interesan en la radiotecnia con carácter exclusivamente personal y sin fines de lucro", dado por la Unión Internacional de Telecomunicaciones.
Radioaficionado puede ser cualquier individuo, mujer, hombre, joven y adolescentes, con interés en incursionar en la experimentación, intercomunicación, la participación y el compromiso para con sus semejantes.
Solidaridad
Una de las razones de ser de la radioafición es la acción solidaria entre quienes se comunican por esa vía, así es como entre las tantas actividades que desarrollan los radioaficionados se pueden contar las que se les requiere en situaciones de emergencia, en catástrofes naturales como las provocadas directamente por el hombre.
En las inundaciones de la provincia de Santa Fe, en 2003, cuando la telefonía tradicional y la móvil e Internet dejaron de transmitir por falta de energía eléctrica, allí estuvieron los radioaficionados con sus instrumentos enviando mensajes para la población afectada y para quienes debían enviarles ayuda.
Es que los radioaficionados poseen, entre todos, una vastísima red de equipamientos de telecomunicaciones que alcanza a todos los confines del mundo. Esta red está disponible para ponerse material y desinteresadamente al servicio de la comunidad en casos de desgracias o desastres naturales. La radioafición ha prestado muchos servicios en casos de terremotos o inundaciones, pidiendo y trasmitiendo datos sobre el estado de salud de familiares que no podían localizarse por los medios normales, sobre medicinas que no se consiguen fácilmente, así como en otros acontecimientos tales como la cooperación con expediciones científicas o deportivas, como bien lo señala Luis Calabrese, jefe de la sección Radioaficionados de la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC).
Pero no todo es la acción sobre la emergencia. Quienes destinan parte de su tiempo a esta forma de comunicación, saben bien aprovechar sus beneficios para la promoción de actividades como debates, concursos, la organización de expediciones y la sana competencia desafiando la capacidad y buscando superar los conocimientos. Al cabo, lo que se fortalece es el sentido de amistad de un punto a otro del planeta, solo a través del intercambio de palabras.
En definitiva, la radioafición es un mundo que está formado por gente con un punto en común: la radio; y que la utilizan intercambiando ideas, experiencias, haciendo amistades, anulando fronteras, olvidando ideologías e incluso niveles sociales ya que en el momento que dos estaciones establecen contacto, solo son dos personas con algo en común, su afición por la radio.
En la Argentina están registrados unos 22827 radioaficionados. Para conseguir la licencia como tal hay que realizar trámites que se gestionan en los Radioclubes, organizaciones de ciudadanos que comparten la afición por la radio y que funcionan en todo el mundo y donde también se puede acceder a los cursos de capacitación, tal como lo dispuso la CNC en la Argentina.
56 años de historia
En Misiones hay 330 radioaficionados con licencia habilitante, de los cuales un número importante está en Posadas donde, a su vez, está la sede del Radioclub Misiones, cuya señal distintiva es LU1IG, signos que para cualquier lector desprevenido no significa demasiado, pero que en el vasto alfanumérico lenguaje de la radioafición permite la también vasta comunicación entre millones de seres en todo el mundo. Entre quienes lo utilizan se denomina señal distintiva.
Los radioclubes, como en Misiones, funcionan como organizaciones no gubernamentales. La actual comisión directiva del Radioclub Misiones, fundado el 12 de Diciembre de 1952, está integrada, entre otros, por su presidente José Luis Pérez/LU2IA, el vicepresidente Paulo Insaurralde/LU7IPI y el tesorero Ramón Suárez/LU5IBI.
La sede social del Radioclub Misiones se encuentra ubicada, como desde hace décadas, en la calle San Luis 1743, entre Bolívar y San Martín, donde se reúnen los socios, se informa a los interesados, se realizan cursos de capacitación y donde, además, ya se cuenta con una estación de radio a disposición de los socios.
Asimismo, este grupo humano pudo lograr un viejo y trascendental anhelo para la instalación de su campo de antenas, para la cual ya cuenta con un predio de una hectárea en la cima del cerro Santa Ana, donde posee una torre con antena de transmisión y recepción de 60 metros de altura para la instalación de sus repetidoras, entre otros proyectos.
Para los estudiantes
Una experiencia para destacar y que da muestra cabal de la trascendencia de la radioafición, es la que se desarrolla desde el año pasado en la Escuela 484 Colonia Aeroparque, hasta donde llegó el proyecto LU-Escuelas, que en Misiones promueve el radioaficionado Elio Váldez/LU1IAL, y que consiste en llevar al ámbito escolar la experiencia de que los alumnos entablen contacto con sus pares de distintas partes del mundo, fundamentalmente de países de la región.
A partir de la primera visita de LU-Escuela a la 484, los pequeños educandos descubrieron un mundo hasta entonces desconocido que los entusiasmó tanto que entre ellos Ivis Marianella Cusolito fue electa abanderada del proyecto para el 2008.
En adelante están previstas vistas a otros establecimientos de Misiones; pero esa es historia para otra entrega.
www.lu-escuelas.com.ar